No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo. Oscar Wilde

lunes, 17 de noviembre de 2014

PAPELES SUELTOS/ 2



          Para no hacer nada, para deambular hasta cansarse. Tomar un desayuno en la mañana fresca de otoño al sol. Un placer. Con el bullicio de la ciudad, de sus calles llenas todavía de los colores del estío.

        En silencio los pensamientos, los andares tranquilos,  los deseos confusos. Sensación hueca de una vida acelerada. Percepción absurda de una idea deseada. Llamativos días para hacer nada, sólo lo que apetezca.

Papeles sueltos