No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo. Oscar Wilde

jueves, 11 de febrero de 2016

TIRAR DEL CALENDARIO


Dos mil catorce, fechas impresas en la piel
¿Casi ya olvidadas?
Dejaron huellas reversibles, discretas, ahí están
¡Sólo recordadas!
Entrar y salir, pruebas, esperas, dudas, incertidumbre.

Ahora queda la certeza de haberlas vivido.
Los años se van, como los días,
como las hojas de calendario.
Vendrán otros, llegarán
¡Viéndolos pasar!
 Entre sus fechas y su importancia.

Para no olvidar, quizás
y desechar los malos ratos, vividos.
En los días, habrá que cambiar el color de la letra.
¡Los ropajes y los vestidos!
y la tinta con la que escribes.
¿Cambiamos el color?



3 comentarios:

  1. Todo cambia mientras el calendario avanza, hasta los colores de las letras, pero en el fondo siempre somos los mismos. Palabras llenas de musicalidad.
    Un abrazo, Carmen

    ResponderEliminar
  2. El tiempo pasa, pero deja su marca en nuestra piel.
    Besos

    ResponderEliminar
  3. El color hay que renovarlo, por más que nos habituemos a alguno. ¡Y hay tantos! Un beso

    ResponderEliminar