Cada día le ayuda a
levantarse. Siempre muy temprano. Cada día y a la misma hora, la traslada a una
habitación en penumbra. Está sentada en una silla frente a la ventana, la que
da a una terraza por donde entrarán los primeros rayos de sol en la amanecida
temprana. El sabe que se quedará ahí, esperando a que la sombra se vaya y llegue la luz e inunde la estancia. Mirará el
mar iluminado por la claridad del día en sus destellos deseados. Su
cara será el espejo que haga desparecer la monotonía. Es, la que habita en su existencia cotidiana, desde aquel día en el que llegó la murria. La de los
tonos grises en los que vive. Es, su vitamina diaria: el mar y la luz del sol.
Es, lo que necesita para cruzar la calle y aparcar las ruedas en la orilla.
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Micro-Re publicado en mi blog en octubre de 2010. Donde
está la frase utilizada por Álvaro Peña en una acuarela que llamó “Cara”
Me ha llevado dos días encontrarlo, hoy lo re-edito para que lo conozcáis y para recordar...
Por sí también queréis visitar y leer AQUÍ: Ximo Segarra "ACAPU" ha hecho las ilustraciones y yo unas palabras escritas en forma de relato: "Hoy en la calle"
Los amig@s crecen y yo me siento cada día más contenta de colaborar... Encantada de ver la ventana abierta llena de gente asomándose...Gracias a tod@s por estar ahí.
Por sí también queréis visitar y leer AQUÍ: Ximo Segarra "ACAPU" ha hecho las ilustraciones y yo unas palabras escritas en forma de relato: "Hoy en la calle"
Los amig@s crecen y yo me siento cada día más contenta de colaborar... Encantada de ver la ventana abierta llena de gente asomándose...Gracias a tod@s por estar ahí.
Sí, para recordar porque a veces escribo y escribo y luego no recuerdo dónde está. Este micro-re ni me acordaba de él a no ser por la frase que Álvaro añadió a su acuarela, bueno ahora mía...
ResponderEliminarNo hay nada como el mar para limpiar... que las marañas de la tristeza no se van así como así. Muy buen micro y gracias por recuperarlo, que yo no lo había leído (bueno, la frase que reescribió Alvaró Peña sí).
EliminarBesos
Los ojos puestos en el origen y final de todo. La murria lo difumina todo.
ResponderEliminarbesos
Pues vivan los recuerdos, aunque hoy los tuyos nos traigan una historia triste. Me llevo el aroma melancólico que lo envuelve. Me gusta mucho.
ResponderEliminarUn beso
Cabopá, mucho dolor y esperanza destila este micro. Dolor por la incapacidad y esperanza porque el mar ayudará en sus ánimos.
ResponderEliminarMe gustó.
Un abrazo.
Perdón, bessets.
EliminarHa sido una suerte que lo encontraras, destila dolor pero se atisba la esperanza.
ResponderEliminarUn abrazo
El mar siempre es una buena terapia para la tristeza.
ResponderEliminarUn saludo.
Que esa murria no nos atrape nunca...te deja vacio!!
ResponderEliminarUn beso
Lo recuerdo, Cabopá, y, como entonces, noto la melancolía que late en él; pero el micro es precioso.
ResponderEliminarBesicos.
Esa murria que a veces nos entra y en según que momentos nos invade...aunque mirando el mar una se distrae porque cada dia es un espectaculo en movimiento... me ha gustado el relato así como las ilustraciones de ACAPU en esa colaboración mutua.
ResponderEliminarRecibe mi saludo.
No sabía lo de murria. Ba verdad es que suena a lo que significa.
ResponderEliminarLa nostalgia vital en un par de párrafos.
Besitos, Cabopá.
Gracias por reeditar esta murria para los que no estuvimos en el 2010.
ResponderEliminarAhora mismo veré a Acapu.
Tienes tantos amigos en este blog, que no sé cómo puedes aparecer por tantos sitios a la vez, creo que te multiplicas en varias :)
Un besote.
Un relato con pena y dolor...esa nostalgia de algo perdido..mirando por la ventana sin movimiento ninguno...!!!
ResponderEliminarUn abrazo
Estos días pasados me he visto imposibilitada a dejarte un abrazo porque no se abría el bloque de comentarios.
ResponderEliminarConseguido; te abrazo y te envío todos los besos atrasados.
El relato de hoy es un poco triste sin embargo está escrito maravillosamente.
ResponderEliminarMe ha encantado el que has publicado conjuntamente con Acapú. Es para sentir vergüenza ajena además de rabia e indignación. Parece mentira que haya gente con corazón de hierro.
Enhorabuena por todas tus colaboraciones. Da gusto verte rebosando alegría.
Un beso, amiga.
Olas de melancolía que quizá la envuelvan un día. Descubrir tantas colaboraciones en la blogosfera es algo que me gusta a horrores.
ResponderEliminarMe cuesta un poco, no sé si habla de él mismo o de una mujer.
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