No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo. Oscar Wilde

sábado, 23 de febrero de 2013

SILENCIO

 Para contemplar el mar en su vaivén 
  disfrutando del rumor de las olas.
 Es preciso, mirar en silencio
 el viento acariciará tu cara
 Bahía de Portmán  "Portus Magnus" desde el Monte Cenizas (La Unión) Murcia

11 comentarios:

  1. He disfrutado mucho del vaivén de las olas viendo esta serie en el ordenador. Como no hacía viento, mi Fuensanta me ha ayudao haciéndome aire con el abanico.

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  2. De nuevo tu hermoso mar para alegrarme la vista y recordarme el rugir del silencio.

    Gracias y besos.

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  3. Una cosa Maricarmen. Tengo algo que comentarte urgente. Entra en mi blog y allí tengo el mail. Me envias un correo y te digo. No es para airearlo aquí en tu blog. Es personal.

    También quiero dejarte unas palabras sobre estas fotos. Hemos tenido oportunidad de disfrutar del mar menor, el Algar, y Cartagena. Me gustan esas fotos donde el horizonte se funde con el cielo.
    Me gustan

    Un abrazo.

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  4. Oigo el mar, es una sinfonía preciosa de baivenes y luces azules que me encantan, tienes mucha suerte de verlo todos los días.
    Un abrazo fuerte amiga.

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  5. Es una vieja canción, la de las olas que van y vienen, con ese estribillo cadencioso que se repite cada vez que el mar se rompe en espuma contra las rocas.
    Un saludo.

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  6. Me gusta ese título que desmiente lo que tus fofos nos dejan escujar: el sonido del mar.

    Un beso grande, Cabopá.

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    Respuestas
    1. es "escuchar", no "escujar" (que es lo que mis dedos han escrito).
      Besitosss

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  7. Con ese mar... poco silencio, aparte del que se lleve en el alma.
    Me encanta la última foto. Un poco más de contraste le sentaría muy bien.

    · BB·HH

    · CR · & · LMA ·


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  8. Me pierdo en tu silencio, escuchando la vida en las olas

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  9. Casi me han salpicado las olas de tus fotos.
    ¡Qué triste!, a un kilómetro del mar y hace días que no lo veo. Qué bien haces tienes en no darle la espalda.
    Un beso

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  10. ¡Qué gusto da acercarse por aquí y encontrar tus olas y tus palabras!
    Un abrazo desde la orilla del Cantábrico.

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