las manos haciendo piruetas al aire
los ojos miran de frente a los que tuercen la vista por las esquina.
Se oyen músicas que vienen del frio,
del tacto del abandono,
en el olfato aromas de perfumes conocidos.
Mientras,
la casa suspira y aspira escuchando las palabras
que caen por las paredes
¡Bienvenido!
Qué buenos recuerdos me trae esa fotico.
ResponderEliminarBesicos.
Un relato precioso, Cabopá.
ResponderEliminarBesos.
Precioso y bonita foto.
ResponderEliminarUn beso
que bonito lo del escalon el pie y el tiempo.
ResponderEliminarpor cierto el reflejo de la foto de los barcos no SOLO se ven edificios(se ve a alguien)
un beso entre rejas
Casi todos los sentidos están presentes en esta composición: hay tacto y olores y sonidos y se ven cosas. Sólo falta tomar algo.
ResponderEliminarUn saludo.
Un regalo para los sentidos.
ResponderEliminarDe pié, sentada, mirando, oyendo, oliendo... una explosión de color de vida...Gracias por el recuerdo...
Besicos
Aromas de primavera, sonidos, se cuelan y trepan como enredaderas…por todos nuestros sentidos.
ResponderEliminarUn besico
¡¡¡Bonitoo!!!
ResponderEliminarSí, las paredes, los escalones, los jardines, las fuentes, el agua, guardan todas las palabras y se escurren los recuerdos.
Un abrazo fuerte amiga, desde mi Librillo.
Ese escalón del tiempo debe estar en todas las casas pobladas por almas. Por su culpa, suspiramos y nos entristecemos. ¡Bendita niñez donde todo es presente!
ResponderEliminarUn beso muy cálido, sin rastros del "tacto del abandono" (qué bonico esto, Carmen).
P.D.- También estoy contenta por su vuelta. Ahora que no nos oye; es que se hace de querer.
Precioso y cargado de "sentido" y de "sentidos", como dice Cayetano. Abrazos ;-)
ResponderEliminar"Músicas que vienen del frío". Claro que se oyen músicas que vienen de allí arriba, de la montaña nevada de Béjar. Hoy mismo, que hace un frío que pela, se oye bien el rumor de las lagunas. Dicen los más viejos del lugar, que cuando se oyen rumores que vienen de las lagunas, cambio de tiempo seguro. En ese caso, me refugiaría en tu casa del Mar Menor, ¿me dejas?
ResponderEliminarBesetes