A la puerta de la casa: dos moreras, una palmera y un banco
Un "granao" con su fruto, la fruta de la armonía
Romero en flor para aromatizar las noches.Una mariposa oportuna se posó en él.
La berenjena morada rica hortaliza con poderes antioxidantes
El naranjo espera paciente el cambio de color
Las granadas exultantes esperan ser recogidas
La huerta verdeaba esplendida, el sol tímido se ocultabaAsí está la huerta, en el otoño adelantado que estamos teniendo, con bajada térmica incluida; digo esto porque aquí, ahora y siempre y en estas fechas de finales de septiembre, lo que toca es: “el veranillo de San Miguel” o de “los membrillos” Ya llegará, ya. Volveremos a tener altas temperaturas y guardaremos los paraguas hasta la próxima “gota fría”.
El clima se ha vuelto un poco loco, el Norte se ha venido al Sur y el Sur se ha ido al Norte. (Habrá que cambiar los libros de Geografía.)
Todo el mundo habla de “sostenibilidad” pero alguien sabe para qué … Aquí dejo estas foticos, son del sábado por la mañana. Antes vivíamos en la huerta, ahora, vamos un día a la huerta.
El clima se ha vuelto un poco loco, el Norte se ha venido al Sur y el Sur se ha ido al Norte. (Habrá que cambiar los libros de Geografía.)
Todo el mundo habla de “sostenibilidad” pero alguien sabe para qué … Aquí dejo estas foticos, son del sábado por la mañana. Antes vivíamos en la huerta, ahora, vamos un día a la huerta.
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ResponderEliminar… con la mirada atenta…
La primera foto es toda una invitación. Los frutos... tentaciones. La huerta, una ambición conseguida... que ricos tomates me he comido!
... saludos desde CR & LMA
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¡Qué bonito...! ¿dónde están tomadas estas fotos?.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBonitas fotos, la huerta lo es casi todo para la vida, pero que poco apoyo recibe, verdad?
ResponderEliminarLas fotos de las frutas te invitan a mordelas y saborear ese sabor intenso de recien cogidas.
Buen blog de una parte de nuestra Región, nosotros de Yecla.
Saludos
Jose Casielles
http://www.casielles.es
Lástima que no la estén quitando a base de ladrillazos, cementazos y asfaltazos...
ResponderEliminarLa huerta, ¡qué maravilla!
ResponderEliminarLas moreras me han recordado cuando era pequeño y mi madre me compraba unos gusanos de seda que metía en una caja de zapatos con agujeritos. Les hacía una cama de morera y, al cabo de un tiempo, se producía el milagro de las mariposas.
¡Qué tiempos!
Besos.
Pero qué bien vives, amiga. Las fotos del reportaje son estupendas, como siempre. Cada fruto que he visto me tentaba, pero las granadas son mis preferidas, aunque la berenjena... qué lujo de hortaliza para ciertos platos.
ResponderEliminarPreciosas fotografías, a mí me encanta el campo, las berengenas,
ResponderEliminarlas granadas y por supuesto las naranjas que no tardaran.
Un abrazo fuerte Rosario
...para satisfacer las necesidades del presente sin comprometer el derecho de las generaciones futuras de satisfacer las suyas propias.
ResponderEliminarHoy he visto a tu hijazo. Tiene la sonrisa de su madre.
Precioso, un lujo para los sentidos. Y esa mariposa oportuna, un azar estético casi milagroso.
ResponderEliminarYo soy "rata ciudadana", nací en la calle Simón García y jamás estuve en la huerta hasta despues de bastantes años casada. Sé que Murcia está y estaba rodeada de huerta, pero no es lo mismo eso que pisar un bancal o habitar algún día al menos en una casa de huerta, yo jamás, jamás. Ciudad y mar. Algún medio veraneo en monte, eso sí.
Me ha encantado todo, considero que es una suerte tener casa de huerta, y más con frutos tan apetecibles como los que nos muestras.