Centro de Alto Rendimiento"Infanta Cristina" Los Narejos (Los Alcázares)
Monitores y escolares se preparan para salir a navegar
Apenas si hay brisa, el cielo anuncia que habrá viento
Mientras, otro preparan las canoas
Arranca el paseo al trasiego de los remos.
Al otro lado del muelle están los más pequeños tomando lecciones
Las nubes silenciosas se acercan, mientras, ellos aprenden los vientos.
Desde la orilla, sentada en la bici me quedo en silencio. Recuerdo a mis hijos cuando eran pequeños... Y cuando descargo las fotos, me acuerdo de Ñoco, pensará que el Mar Menor derramará su agua sobre el teclado...
Monitores y escolares se preparan para salir a navegar
Apenas si hay brisa, el cielo anuncia que habrá viento
Mientras, otro preparan las canoas
Arranca el paseo al trasiego de los remos.
Al otro lado del muelle están los más pequeños tomando lecciones
Las nubes silenciosas se acercan, mientras, ellos aprenden los vientos.
Desde la orilla, sentada en la bici me quedo en silencio. Recuerdo a mis hijos cuando eran pequeños... Y cuando descargo las fotos, me acuerdo de Ñoco, pensará que el Mar Menor derramará su agua sobre el teclado... Los blogs cruzan la península,como los sueños
bonitos paseos por la orilla del mar. disfrutalos y nos los enseñas a nosotros con tus fotos
ResponderEliminarun beso
A mi me has traído a la memoria un verano loco de juventud capitaneando el snipe "Anchoa" de madera en blanco y azul que no había forma de bajarle la vela y había que arrollarla al mástil y una "peña" de unos 10-12 chicos y chicas alegres "reventando millas" a punto de hundirlo.
ResponderEliminarEn La Ribera sería el verano que yo tenía 17 años.
Largo y cálido verano de dos meses, con baños en snipe, bicicleta siestera para irnos a las pinadas, tarde en el Miramar y una noche guateque en casa de chica y a la siguiente cine.
Inolvidable y dulce pájaro de juventud.
Qué fotos refrescantes para ahuyentar el calor que hace aún a estas horas. Me dan ganas de navegar y alejarme de aquí a algún lugar, no sé, distante mar adentro.
ResponderEliminarBesicos, resalá.
PD: los hijos de otros siempre nos recuerdan a los nuestros.
Qué bonitos los barcos que has sacado en estas fotos, en cuanto vaya por allí me pongo como loco a pintarlos jejeje
ResponderEliminarMuy divertidas y refrescantes esas actividades marineras. Preciosos los veleros. ¡Qué bien se vive de vacaciones!
ResponderEliminarUn saludo.
a mi tambien me ha traido recuerdos...
ResponderEliminarmuy parecidos por cierto
jejeje
cuanto azul en este blog eh??
un besito de la manini
ResponderEliminar• La última foto es toda una provocación. Pienso en el vaciado inmediato del Mediterráneo, cayendo agua salada pantalla abajo inundando el teclado, mojando al vecino del piso de abajo... ¿que pensará?
• Gracias, Carmen, por la alusión que hace ilusión.
• besicos salaos
CR & LMA
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Bellas fotos y no menos hermosas palabras, tocaya. ¡Quién fuera un peque tomando lecciones de marinero casi en tierra!
ResponderEliminarBesitos
Estimada Cabopallá:
ResponderEliminarEs usted una mujer cruel e insensible, ya que fustiga a los honrados trabajadores con imágenes paradisíacas de mar y asueto, mientras nosotros sufrimos en las insufribles galeras del trabajo.
¡No creo que llegue a fin de mes!
Que mi deseperación caiga sobre su conciencia...
Claro,usted hace lo que quiere, porque como sabe que le seguiré queriendo lo mismo...
Besotes
Cuando era una adolescente mi hija Rosa también estuvo quince días en el Centro de Alto Rendimiento, recuerdo que fuimos a visitarla y dimos un paseo por el paseo (valga la redundancia) de Los Narejos.
ResponderEliminarBonito reportaje.