Por la calle
pasea. Pensando,
cambia opiniones consigo misma.
Y sólo se dice:
…una camisa para efe
…un detalle para eme
Un pensamiento gris,
una ilusión por las esquinas
un saludo de hace tiempo
Un beso bajo el Arco:
“Ya no estás nunca a mi lado corazón…”
Suena el acordeón.
A todas las mujeres con las que me cruzo en mi paseo
La foto que acompaña a esta "Cinta" es de una escultura urbana de Carmen Conde (poeta y primera mujer miembro de la Real Academia de las Letras. en la calle Carmen de Cartagena.
ResponderEliminarPrecioso ese pensamiento gris, me suena mucho porque tengo muchos pensamientos de esos, y muchas ilusiones por las esquinas, por las calles y plazas que nunca se hacen realidad. La escultura define muy bien el poema.
ResponderEliminarBuenas noches.
Cada paso marca un pensamiento...
ResponderEliminarcamina hacia el frente,
pero el pensamiento
va y viene
como un péndulo incesante.
Buenas noches y buenos días, murcianica de mis entretelas...!!!
Cabopá, me encantan estos paseos tuyos en los que existe reflexión consigo mismo. A veces, son necesarios.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Bessets.
Dan ganas de sentarse a su lado y acercar el oído a su cuerpo metálico para escuchar los murmullos literarios de esta mujer que merece una escultura y mucho más, al igual que muchas mujeres anónimas con las que nos cruzamos en nuestro día a día.
ResponderEliminarBesicos
Una mujer pensando en sus cosas y con la generosidad hacia los demás.
ResponderEliminarY una señora de las letras para no olvidar.
Reciba mis saludos.
Muy aprovechado el paseo y, como siempre, las féminas pensando en los demás antes que en ellas mismas.
ResponderEliminarSubrayo estos tres versos, que me han gustado especialmente:
"Un pensamiento gris,
una ilusión por las esquinas
un saludo de hace tiempo",
Besos, hoy sin diminutivos, qué caray.
Un poema de la entrega... porque hay muchas mujeres convertidas en estatuas, de sal, de bronce, de lo que sea. Y debemos acabar con ello, si el Opus nos lo permite (lo digo porque me parece que llegan otra vez los ministros del Opus, caray)
ResponderEliminarAsí es, paseando vamos dándole a la mollera, incluso a veces verbalizamos el pensamiento y se nos escapa algo por la boca.
ResponderEliminarMuy lindo el texto y la foto de esa mujer serena.
Besos guapa.
Si te digo que cuando voy de viaje pienso más en los detallitos para familia/amigos que para mí...me viene al pelo tu reflexión.
ResponderEliminarBesitos, cielo.
Precioso.
ResponderEliminarY me entero de casualidad de que vas a ver publicado un microrrelato...desde ya mismo ¡enhorabuena!
Un besico
parece una mujer entregada a los demás y que nunca recibe nada. Precioso poema.
ResponderEliminarbesicos y feliz puente, estoy fuera de casa pero me he podido conectar un rato.
Precioso paseo Cabopá, me gustan esos pensamientos grises...Y también la fotico.
ResponderEliminarBesos desde el aire
¡Qué bonito maricarmen! me parece un paseo de una calidad impresionante, con un ritmo maravilloso.
ResponderEliminarBesos
Bellísimo poema. Es muy nostálgico para este otoño que quiere ser primavera. Precioso, la foto lo ilustra a la perfección. Un beso. Mar Horno.
ResponderEliminarBuen paseo y precioso poema.
ResponderEliminarMe gusta que hables de Carmen Conde como "poeta". Es válido también para las mujeres que se dedican al noble arte de los versos.
Un saludo.
Muchas veces, cuando paseo sin la cámara, me siento como esa mujer que describes, con el paso tranquilo y los pensamientos desordenados que van de un tema a otro... hasta que zas, se cuela un poco d emelancolía.
ResponderEliminarVoy a seguir el paseo, que ando muy atrasada con tu blog y me lo quiero perder.
Un beso, grandote.
Ah, Maricarmen, tú que eres una mujer que conoces las flores, ¿que flor es el gallo de pelea de mi collage?
Qué bien escribes, poeta.
ResponderEliminarYa que mencionas a Carmen Conde, apunto a su marido, Antonio Oliver.
Besicos.
P.S. Del café, tú mandas. Te mando un email.
Gracias Thornton por la "a" nadie se había dado cuenta...
ResponderEliminarBesicos
melancolía.
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