Es, cada verano mostraros las imágenes que voy recogiendo en mis paseos en bicicleta, aquí está el primero. Mi bici, mi cámara y yo...
Ella conoce mi miradas y se para y luce su porte junto al mar, sabe que no es un modelo a la última pero me lleva y me trae en las mañanas tranquilas por la orilla del Mar Menor.
La playa empieza a ponerse, el silencio y la calma acompañan,
mientras la brisa salina nos saluda
Las madrugadoras bañistas ya tienen tema de conversación:
-María, qué tienes hoy para comer
-Un caldo de pescado. Contesta Paquita
-Yo haré unas lentejas, dice María
- Mira que apañás... Mañana os contaré que hago yo.
Sigo mi paseo y me encuentro con el marido de Paquita pescando para el caldo
...Y con la placidez del mar el mástil harto de estar siempre recto
se introduce en el agua haciendo burbujas juguetón
La tertulia marítima se va ampliando
no sólo se huele a fogones, ahora hablan del "copago"
La mayoría de los bañistas tempraneros son pensionistas.
Sobre el pantalán han llegado con sus redes los pescadores
vuelven de pasar la noche en vela, traen algunas doradas del Mar Menor.
Iré a la pescadería...
Por la tarde, encontré a un vaquero plantando la sombrilla
al lado su bici amarilla.
Desde Los Alcázares (Mar Menor)
Mis foticos, mis repentes, mi bici y yo...
Todas las foticos son del mismo día, según la orientación según el enfoque la luz entra y sale como el sol, las nubes, los colores, la brisa e incluso los sabores del silencio o las voces que con la calma llegan desde el agua....
ResponderEliminarTengo mucho mar, pero no tan cerca, ¡qué dichosa!
ResponderEliminarSiempre me refrescas y esa placidez marina es envidiable.
Besos besos
¡Qué temprano te levantas, Cabopá! A esa hora no han puesto ni las olas. Muy bueno el comentario sobre el mástil rebelde y juguetón.
ResponderEliminarVoy a coger mi bici y a darme una vuelta, que m'ha dao envidia :-)
Da gusto entrar en tu casa y pasear contigo por la orilla del mar.
ResponderEliminarBesos desde el aire
Que paseo tan estupendo hemos dado contigo, hemos hablado de comido, del
ResponderEliminarcopago, de la pesca, y sobretodo hemos disfrutado con estas hermosas fotos
que nos han alegrado la mañana.
Feliz dia.
Qué bonito paseo, Cabopá. Nosotros también paseamos en bici de una playa a la otra, de un pueblo a otro. Mi marido se lleva a Daniel en su bici, y yo llevo en la cesta de la mía a la perra :-)
ResponderEliminarBesos mediterráneos.
Cabopá, excelente crónica de un día de vacaciones, que logra que la "envidia" me visite.
ResponderEliminarDisfruta de tu mar y de tus merecidos días de vacaciones.
Bessets.
Ah, qué nostalgia de sol...
ResponderEliminarEn Argentina estamos viviendo una ola de fría polar, agradezco y disfruto la suave calidez de tus fotos.
Preciosas!
Beso grandote
Muchas gracias. Los que estamos en tierra adentro agradecemos esa grandeza de color, se superficie cambiante, de profundidad, de lejanía, de inmensidad, de brillos, de sombras... pero siempre ahí, acompañando.
ResponderEliminarUn besooo grande.
Me encanta tu ojo clínico y paparazzi del Mar Menor, Carmencica. Deseo que llegue el verano para darme un chapuzón en las aguas saladas del Río Cuerpo de Hombre o cotillear tu ventana a las aguas saladas del Mediterráneo. El día estaba un poco neblinoso, ¿no? Imagino que sería el calor...
ResponderEliminarBesicos
Gracias por traerme ese trocito de mar. Las fotos me gustan. Destaco tu detalle del mástil.
ResponderEliminarHe respirado el mar desde tus fotos y me ha sentado de maravilla.
ResponderEliminarComo cada verano, traes frescura salada, lo que se agradece muchísimo.
Un abrazo muy grande, hoy enorme, que es tu santo. ¡Felicidades!
Cabopá, tu sensibilidad nos acerca esa realidad encantadora y diaria. Casi diría que las fotos huelen a mar, que se nota el fresco de la brisa, que el frío del agua, que me canso de pedalear, que siento la arena en los pies, pero que de lo que no me canso nunca es de que el mundo se asome como se asoma en tus fotos: con esa belleza y esa verdad.
ResponderEliminarGracias por el paseo, Capobá. Es refrescante.
ResponderEliminarBesitos
¡Qué bonico todo! Es como pasear por allí a través de tu mirada. Y qué calma en el mar...
ResponderEliminarun besico
Temprano es cuando sedisfruta de la playa....
ResponderEliminarBesos
Me encantan tus fotografías. Soy aficionadilla a la fotografía (como a casi todo), y aunque no las prodigo en el blog, has de saber que mi bicicleta es protagonista indiscutible en muchas de ellas. Haría buena pareja con la tuya. ;)
ResponderEliminarCabopá ....creo que en verano ....publicaré micros con fotos ....¿pero cómo? ¿que ya estamos en verano? ...¡ay!, que aquí el tiempo es cambiante y lo mismo es verano que invierno.
Besos dulces (sin mar).
Preciosas fotografías, Cabopá. Y me gusta mucho tu relato que las hilvana. Gracias por mostrarlo.
ResponderEliminarBesos
Me gustan todas las fotografías y tus diálogos en la orillica del mar.
ResponderEliminarFelicidades y un abrazo fuerte amiga, desde mi Librillo.
Qué maravilla de fotos, Cabopá, empezando por la primera. Y los pies de página, no tienen desperdicio. Todo junto hace un relato poético. Me encanta cómo fotografías, lo de escribir ya te lo había dicho. Se nota que disfrutas.
ResponderEliminarUn abrazo.