En el cuaderno de la memoria lo lleva todo escrito. Ahora no se acuerda: ¿Qué es lo qué anotó? Sólo sabe que antes de salir a la calle alguien le ha acariciado en la mejilla diciéndole: “Marta, qué guapa estás”
jueves, 19 de mayo de 2011
LA CARICIA
En el cuaderno de la memoria lo lleva todo escrito. Ahora no se acuerda: ¿Qué es lo qué anotó? Sólo sabe que antes de salir a la calle alguien le ha acariciado en la mejilla diciéndole: “Marta, qué guapa estás”
sábado, 20 de noviembre de 2010
A UN AMIGO
sábado, 6 de noviembre de 2010
EL CONTADOR (carta)
Te has ido sin avisar, sin dejar la nómina del total ,andaba ya por los cuarenta mil, a los que yo pensaba hacer una fiesta próximamente; de los que se asomaban a diario algunos días eran muchos, siempre algo arbitrario porque, ¿Quién estaba contigo para contarlos? Lo más creíble de tu buen hacer gratuito y mecánico. ¿Quién sabe más qué tú, quienes eran? Han sido esos, a veces, eran dos, o tres, o cuatro…otras veces más. Sabes, contador desaparecido sin avisar, me gustaba saber que estabas y me hablabas en compañía.
¡Ay, contador anónimo de vistas! Me faltas dos días y ya te echo de menos. Te he buscado donde te encontré, allí hay un mensaje lacónico en letras rojas muy pequeñas, donde se advierte que por el momento has quedado sin servicio: El servicio de contador de visitas está desactivado temporalmente, muchas gracias.
¿Ahora qué hago yo? Esperar a que te activen de nuevo, cómo sabrás quién me visita y cuántos; volverás conmigo sin llamarte, te acordarás de las cifras ya sumadas con tu mecánica maravillosa que enumeraba a diario las visitas.
Yo confiaba en tu memoria digital o analógica, quién sabe cómo te habrían programado para que supieses quién me venía a ver. Tu presencia en mi ventana se había hecho imprescindible para una voyeur declarada.
Así que aquí me quedo desconsolada y sin ánimo. Has abierto en mí una herida profunda, sin solución de continuidad. No lloraré tu ausencia por mucho tiempo, sólo te echaré de menos como te digo, en esta carta improvisada ante tu ausencia fortuita sin previo aviso, qué menos. No quiero ni pensar que hayas entrado en “crisis” por tu gratuidad anunciada a los cuatro vientos.
He observado en el muro de los contadores de visitas que tienes gran competencia en número, forma, contenido y no sé que más gaitas. Pero tú me gustabas por que eras pequeñito, discreto y sencillo, como las cosas bellas. Te elegí por eso querido, me costará trabajo sustituirte.
Con todo el dolor, estas letricas para despedirme de ti… Agradezco tus servicios y te dejaré un hueco en mi ventana durante unos días, semanas o meses por si quieres volver. Tal y como está escrito en el mensaje que te predecía: “Quienes pasan por aquí son, bienvenidos”.
Adiós contador de visitas, adiós.
lunes, 27 de septiembre de 2010
ÉL TAMBIÉN
reconociendo olores y pisando calles no frecuentadas
Muy digno a la espera de la marcha; se lo ha pasado
en grande saludando a otros de su especie
miércoles, 16 de junio de 2010
PARA ELLOS
Hoy, mientras llovía, una madre y su hija guardaban el edredón en el altillo del armario. Como siempre, se tienen demasiadas cosas en poco espacio y han tenido que sacar unas cuantas para hacer hueco. En un cabás con dibujos de Mickey Mouse que le regaló la tía cuando era pequeña. Hoy han encontrado un tesoro. Algo que la madre creía haber perdido durante el traslado de ciudad. La sensibilidad para el recuerdo, la memoria que tiene la hija y el mimo con que guarda las cosas, han logrado emocionar a la madre al recordar las largas y continuas audiciones en aquel magnetofón o radiocasete de teclado, el primero que ella tuvo ya de mayor. Lo guardó con cariño y nostalgia, porque se lo había comprado con su primer sueldo. Lo colocó en la estantería de la habitación de sus hijos, con él que cada noche antes de dormir, oían canciones y cuentos populares, comprados, en un mes de junio en la Feria del Libro. Escucharon tantas veces las canciones que la casa sonaba al “patio de mi casa”, “que llueva, que llueva”…”Mambrú se fue…”
Hoy, cuando ya había dejado de llover han vuelto a guardar el tesoro hallado. Sé que algún día otra madre pondrá estas y otras canciones en una habitación donde haya niños.
O en un coche, quizá de color amarillo y dos puertas, otros escucharan la banda sonora de Grease jaleando y alegrando el viaje hasta llegar a casa de los abuelos. La cantidad de cosas que pueden suceder en un día de lluvia, cuando la primavera parece que va empezar a la vez que termina.

miércoles, 5 de mayo de 2010
viernes, 23 de abril de 2010
LEER...ESCRIBIR...
domingo, 18 de abril de 2010
¡¡ FENÓMENO...??

Por la calle:
-Esto es el cambio climático...
Unos niños:
-Mi mamá dice que antes no pasaban tantas cosas...
Mi profesor de Lingüística, decía:
-Los habitantes de Islandia hablan para adentro, se tragan las vocales...
sábado, 17 de abril de 2010
lunes, 12 de abril de 2010
¡¡SIÉNTATE CHARLI!!
Cuando viene a casa, sabe a quién tiene que acercarse y dónde se tiene que sentar para que le den jamón...Charli es un perro adoptado y tiene "tres ángeles" que lo cuidan: Raquel, Mar, Ana.
...y se sienta cerca de la despensa a la espera del rico manjar, mueve el rabo, se lo come y quiere más...
domingo, 4 de abril de 2010
CENTENARIA
Tomelloso 1936
Premio Príncipe de Asturias de las Artes 1985
Premio Velázquez de Artes Plásticas 2006
En mi retina quedan los largos paseos
miércoles, 3 de febrero de 2010
¿ QUIÉN LO SABE ?
domingo, 31 de enero de 2010
MIS MANOS
jueves, 31 de diciembre de 2009
lunes, 14 de diciembre de 2009
UNA GATA EN EL PUERTO
como el azabache; preciosa la felina, parece una vaca, pues está preñada
por esa preñez de un macho porteño que sólo ella conoce.
La secuencia de lo aquí contado, es real, tal como están hechas las fotos. Así fue y así os lo he contado...Le prometí a la futura mamá que le mandaría las fotos... Ella me contó en su lenguaje gatuno que le gustaba visitar algunos blogs.