El
mar, el mismo mar. El de ahora, el de ayer, el de siempre. Azul a tres bandas
según la distancia, según el viento. Ahora lejos lo veo, lo recuerdo, el de ayer está en mi
retina siempre en movimiento, ese que se queda en la memoria. Juego de brisa y
arena, de paseos al sol y a la sombra; un vasito de agua fresca y una fruta
brillante. En los días de mar con alegría, en los días de mar con esperanza sobre
la arena, los cuerpos al sol, mientras camina dejando huellas firmes de la vida que acompaña.
Y los azules se quedan o se van como las flores amarillas que verdean; no hay tiempo que perder en los senderos de la indecisión. Sin pausas sin prisas que te lleven a lo alto de la cala, allí la gravedad sigue siendo la ley. Las miradas al azul llenan los días de la semana, cuando no te asomas y los vientos te traen los sabores del azul salino.
Y los azules se quedan o se van como las flores amarillas que verdean; no hay tiempo que perder en los senderos de la indecisión. Sin pausas sin prisas que te lleven a lo alto de la cala, allí la gravedad sigue siendo la ley. Las miradas al azul llenan los días de la semana, cuando no te asomas y los vientos te traen los sabores del azul salino.
Desde el mar, junto al mar...Foticos, cosicas mías...
Cómo me gustan tus foticos y las cosicas tuyas... :)
ResponderEliminarBesos
Preciosas cosicas tuyas,
ResponderEliminarUn beso,
Pero no es el mismo mar. Tú misma lo has demostrado mil veces con esas fotos tan distintas unas de otras, con esos cambios de luz y ese azul que se aclara o se oscurece dependiendo de la estación...
ResponderEliminarBuenas fotos y buen texto, como siempre.
Un saludo.
Podía ser primavera. Aunque en tu blog siempre es primavera, aunque cuando asoman nubes y llueve y hace viento. Siempre primavera. Un beso.
ResponderEliminarLa mar siempre ronronea, estés lejos o cerca, esté brava o en calma, siempre ronronea nuestra paz.
ResponderEliminar¿Y estas fotos son de ahora mismo? Eso quiere decir que ya estáis en plena floración... Y yo con esta alergia... Aunque los aires marinos imagino que mitigarán la concentración de pólenes.
ResponderEliminarBesitos
Insisto en que me gustan estos ejercicios de imágenes y texto, Cabopá, en los que aquellas apoyan a la vez que se apoyan en estos.
ResponderEliminarEs un gusto leerte.
Un abrazo,
Precisamente en estos días he disfrutado mucho del mar y del sol. Esos riscos me recuerdan un poco a los de aquí.
ResponderEliminarBesitos, Cabopá
Precioso tu mar Carmen, esas fotos demuestran lo estupenda fotografa que eres y tus letras son un lujo.
ResponderEliminarMi aplauso para tí amiga.
Un abrazo desde mi Librillo.
Gracias!!! :)
ResponderEliminarBesos desde el aire
Pues mira a mí me gustan y mucho tus foticos y tus cosicas, es un disfrute para los sentidos.
ResponderEliminarBesitos
Veo que eres una enamorada del mar, de tu mar. Y por lo que veo, no me extraña. Yo también amo mi Cantábrico, bravo, y bello, pero no se decirlo con palabras tan brillanes como las tuyas.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte
Un texto reflexivo de admiración y energía. Para mi, que vivo en Madrid, siento rabia de solo ver asfalto y cemento. Gracias por traerme hasta aquí su color y su sabor.
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